Comodoro Rivadavia, por el jardín Abracadabra. Tandil, por mi papá. Bragado, porque huele a tilo en primavera. San Martín de los Andes, por los Rossi. El Bolsón, por los Lozano. Mar del Plata, por lo que nunca saldrá de ahí.
Neuquén, por toda una mitad. Buenos Aires, por toda la otra.